La continuidad de la crisis podría traer una mayor desestabilización en la región levantina y una expansión fuera de sus límites, declaró al canal de televisión TRT el jefe de la dirección de comunicaciones de la presidencia, Fahrettïn Altun.
Para evitar eso, Israel debe cumplir al pie de la letra la resolución aprobada recientemente por la Asamblea General de la ONU, consideró Altun, en referencia al documento respaldado por 120 países, con el voto en contra de 14 Estados y la abstención de 45.
La resolución llama a una tregua inmediata, el respeto al derecho internacional humanitario, el suministro a la bloqueada y hostigada población de Gaza de productos de primera necesidad y la liberación de todos los civiles retenidos.
Además, la iniciativa presentada por Jordania, con el coauspicio de unas 50 naciones, en su mayoría árabes, también prevé la llegada sin obstáculos de ayuda humanitaria a Gaza, donde los bombardeos israelíes causaron más de seis mil muertos y unos 16 mil heridos.
El vocero afirmó que su país hace ingentes esfuerzos para resolver el conflicto israelo-palestino, entre los cuales figura la activación de un grupo de países garantes y la convocatoria a una conferencia de paz.
Altun calificó a las acciones bélicas de Israel en Gaza como crímenes de lesa humanidad, en una región que sufre una tragedia diaria sin precedentes, estimó.
La víspera, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, al intervenir en un mitin en apoyo a Palestina en Estambul, afirmó que su país acusaría a Israel de ser un criminal de guerra por la masacre perpetrada contra Palestina.
Desde el pasado día 7, después de una operación lanzada por el ala militar del movimiento Hamas contra Israel, en medio de su ocupación de 75 años en Cisjordania, los bombardeos de Tel Aviv destruyeron miles de edificaciones, incluidas escuelas, hospitales y oficinas de la ONU.
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