El nivel de asistencia que se ha permitido ingresar hasta este momento es completamente inadecuado y no está a la altura de las necesidades de la población, lo que agrava la tragedia humanitaria, aseguró el alto representante en un comunicado divulgado aquí.
El titular de la ONU insistió en su llamado a un alto al fuego humanitario inmediato y a un acceso «sin obstáculos de manera consistente, segura y a escala para satisfacer las necesidades urgentes creadas por la catástrofe que se está desarrollando».
Al mismo tiempo, advirtió del riesgo de una escalada peligrosa más allá de la Franja e instó a la máxima moderación para evitar una conflagración más amplia.
Guterres dijo estar profundamente alarmado por la intensificación del conflicto entre Israel y Hamas y otros grupos armados dentro del enclave.
«Esto incluye la expansión de las operaciones terrestres de las Fuerzas de Defensa de Israel acompañadas de intensos ataques aéreos y el continuo lanzamiento de cohetes hacia Israel desde Gaza», enfatizó.
Los civiles, agregó, han sido los más afectados por los combates actuales desde el principio; su protección en ambos lados es primordial y debe respetarse en todo momento.
El máximo responsable de la ONU remarcó su condena a los ataques de Hamas el 7 de octubre último en territorio israelí y llamó a la liberación inmediata e incondicional de los rehenes.
Igualmente, condenó la matanza de civiles en Gaza y lamentó los informes que estiman que dos tercios de los fallecidos en ese territorio son mujeres y niños.
Guterres honró a los colegas de las Naciones Unidas víctimas de los bombardeo en la Franja durante las últimas tres semanas y recordó las reglas del derecho internacional al respecto.
«Todas las partes deben respetarlo, incluidos los principios de distinción, proporcionalidad y precaución», aseveró.
Esta escalada no hace más que aumentar el inmenso sufrimiento de los civiles, aseguró al recordar el alto número de vidas humanas perdidas.
Más de 670 mil personas desplazadas en Gaza se encuentran ahora en escuelas y edificios superpoblados de la Agencia de Obras Públicas y Socorro de la ONU, precisó el lunes el comisionado general del organismo, Philippe Lazzarini.
Los refugiados viven en condiciones espantosas e insalubres, con alimentos y agua limitados, durmiendo en el suelo sin colchones o al aire libre, agregó el titular en una sesión informativa al Consejo de Seguridad.
Ningún lugar es seguro en Gaza, donde casi el 70 por ciento de los muertos reportados son niños y mujeres, dijo.
Demasiadas personas murieron y resultaron heridas mientras buscaban seguridad en lugares protegidos por el derecho internacional humanitario, denunció Lazzarini.
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