Al portal noticioso Al Quds precisó que entre los fallecidos por las bombas israelíes está la esposa de Abu Hatab, un hijo y un hermano.
El comunicador realizaba reportes diarios frente al Hospital Médico Nasser, ubicado en esa sureña localidad, sobre los crímenes cometidos por el Ejército israelí contra la población en el enclave, destacó la fuente.
Las autoridades de la Franja acusaron esta semana a la vecina nación de asesinar a más de 30 trabajadores del sector y de bombardear medio centenar de oficinas de prensa desde el inicio de las hostilidades, el 7 de octubre.
La agresión se vuelve más feroz cada día, denunció la entidad tras criticar “las masacres más atroces contra civiles en general y periodistas en particular”.
Ante esa situación, llamó a la comunidad internacional a intervenir de manera urgente para finalizar la escalada y proporcionar protección a los comunicadores y sus instituciones.
El Sindicato de Periodistas Palestinos expresó también su profunda preocupación por la vida de sus miembros en la Franja.
Las incursiones israelíes buscar silenciar y ocultar los crímenes del Ejército en ese territorio, subrayó.
Recientemente, el Comité de Libertades del Sindicato criticó los ataques contra medio centenar de sedes de instituciones del sector, incluidas las oficinas de la televisora qatarí Al Jazeera, de Palestina TV, de las agencias de noticias Maan, así como de los periódicos Al Quds y Al Ayyam.
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