En declaraciones a la red informativa con sede en Líbano, la comunicadora reafirmó la legitimidad de su trabajo periodístico y el apego a la ética, en medio de las restricciones impuestas por las autoridades de Tel Aviv a los medios y profesionales.
Después de sufrir una emboscada y las amenazas del reportero del canal 12 israelí Haim Edgar, la periodista de Al Mayadeen enfatizó que tal suceso se enmarca dentro de la política sistemática de régimen de intimidación y un intento de callar a todos los palestinos, en esecial dentro de las zonas ocupadas desde 1948.
Para Mahameed, el establishment israelí persigue con todas sus fuerzas impedir que salga cualquier voz que cuente otra narrativa opuesta a la suya; y en ese sentido, aumenta la persecusión de activistas políticos, figuras religiosas y periodistas ya sea en el terreno o en las redes sociales.
«Desde el comienzo de esta guerra, he estado expuesta a una campaña de incitación israelí, ya sea en la televisión, en los sitios web o en las redes sociales», precisó.
En este sentido, manifestó que en el último mes crecieron las violaciones, las restricciones y el acoso al trabajo de los periodistas palestinos, incluidas limitaciones de movimiento dentro de la Ciudad Vieja de Jerusalén.
Al respecto, comentó que el gobierno de Tel Aviv utiliza el pretexto de incitación al terrorismo y sus medios actúan como si fueran el ejército e intentan dar una legitimidad a los crímenes cometidos por los uniformados contra civiles en la Franja de Gaza.
Las autoridades israelíes argumentan que hay medios de comunicación extranjeros que difunden mentiras y exponen a sus fuerzas al peligro, indicó.
Sobre este tema, Mahameed agregó que el gabinete decidirá la orden de emergencia, que permite cerrar estaciones de transmisión “que perjudiquen la seguridad de Israel”.
En este contexto, agencias como el Mossad y el Shin Bet recomendaron suspender las transmisiones del canal Al Mayadeen desde Israel, divulgó la propia multiplataforma.
Por otro lado, el Ministerio de Comunicación presentará ante el gabinete de Benjamín Netanyahu la solicitud de detener de inmediato la cobertura del canal panárabe en territorio israelí.
A juicio de la red informativa, esto sucede a la luz de los intentos israelíes por oscurecer la verdad y encubrir las masacres cometidas a diario contra los palestinos en Gaza y Cisjordania.
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