Aboul Gheit destacó la lucha de los habitantes de ese territorio para impedir su desalojo y respaldó la negativa de Jordania a permitir un nuevo éxodo de ese pueblo, como ocurrió en 1948.
Señaló que desde el inicio del nuevo ciclo de violencia al menos 163 palestinos murieron por el accionar de los colonos y las fuerzas de seguridad en Cisjordania y más de dos mil resultaron heridos
Precisamente, alertó que la violencia de los colonos en esa región alcanzó niveles sin precedentes y afirmó que no pueden tolerarse esas acciones.
Ante esa situación, llamó al mundo a condenar los ataques contra viviendas y cultivos agrícolas, los asesinatos, la destrucción de propiedades y la expulsión de esas personas de sus hogares.
También denunció “el racismo y el odio abominable” de los colonos judíos contra los palestinos.
El gobierno derechista israelí está llevando la situación al borde del abismo al proteger y apoyar esas prácticas y alentar “la cultura de la impunidad”, subrayó.
mem/rob