La situación dentro del Hospital al-Shifa, el más grande del enclave, es horrible y cada vez más difícil, denunció el cirujano Ahmad Mokhallalati a la televisora a Al Jazeera.
“Apenas podemos tratar a los pacientes dentro del hospital y estamos en medio de la zona de guerra. Hay continuos ataques aéreos y los drones están sobrevolando el área”, detalló.
Señaló que cualquier persona, incluidos los médicos, que se mueve entre los edificios del complejo puede ser blanco de los disparos de los francotiradores israelíes.
Mokhallalati afirmó que el anuncio del ejército sobre la creación de un corredor de evacuación en el lado este del centro de salud “es una gran mentira”.
“Ayer vi frente a mis ojos a una familia de cinco personas que intentaron moverse desde el este y les dispararon”, afirmó.
Un reportero de Al Jazeera reportó que el hospital es asediado por tanques y vehículos blindados, apostados muy cerca de las puertas del inmueble. Detalló que decenas de los cuerpos aún yacen en el patio del complejo y en sus alrededores, pero es imposible evacuarlos porque nadie puede llegar al lugar.
Israel afirma que debajo de la edificación se esconde el cuartel general del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas), lo cual fue desmentido en reiteradas ocasiones por ONGs, agencias de la ONU y los palestinos.
Según el Comité Internacional de la Cruz Roja, allí hay más de 60 personas en cuidados intensivos, casi 40 bebés en las salas de prematuros y de guarderías, y más de 500 pacientes en los departamentos de diálisis.
El canal noticioso informó que los hospitales de Al Nasr y Al Quds también fueron atacados en las últimas horas.
En declaraciones a la televisora, Fikri Rofiul Haq, un voluntario médico, narró la difícil situación en el hospital Indonesio.
Haq es uno de los tres indonesios que trabaja en ese centro médico para ayudar a los palestinos.
“Ahora el personal solo recibe una comida una vez al día a la hora del almuerzo, para el desayuno y la cena, el personal come galletas o dátiles”, detalló.
El área alrededor del hospital está siendo bombardeada constantemente y cuando eso sucede, siento un miedo muy humano, comentó.
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