Las pinturas proceden de colecciones privadas y museos como el MoMA, el MET, el Louvre y el Prado, y se suman a las que posee el Reina Sofía de Picasso, entre ellas nada menos que el monumental Guernika.
Picasso 1906, la gran transformación, es el nombre de la exposición en la cual se analiza los cambios del maestro del cubismo y su sensibilidad desde el punto de vista del erotismo.
Los reyes de España, Felipe VI y Leticia, tuvieron a su cargo la apertura de la muestra que estará abierta hasta el 4 de marzo, para poner así broche de oro a las conmemoraciones en España, Francia, Estados Unidos y buena parte de Europa del 50 aniversario del deceso del artista malagueño.
El comisario de la exposición, Eugenio Carmona, opinó que se ha exagerado la trascendencia del cuadro ‘Las señoritas de Avignon’ (1907) con respecto a su aportación a la modernidad.
Fue en 1906 cuando Picasso transformó el concepto de desnudo por el de cuerpo y dio un papel relevante al masculino, precisó Carmona.
Recientemente, se puso en marcha otra muestra en Madrid de Diego Velázquez y Pablo Picasso, en la sede de la Casa de Velázquez de esta capital.
Bajo el nombre del libro ‘Diego Velázquez invita a Pablo Picasso’, que publicado por la institución junto con el Museu Picasso de Barcelona, refleja dos épocas de varios artistas y de temáticas y documentos inéditos encontrados.
La muestra estará abierta al público hasta el 15 de febrero de 2024, en la Casa de Velázquez. En su primera parte, la muestra propone un recorrido documental.
«Es una doble exposición, pero todo forma parte de la misma. Todo ha sido concebido en estas paredes que se han convertido en piedras, monolíticos y en esculturas donde hay muchas imágenes, películas, postales», detalló Emmanuel Guigon, comisario de la exposición.
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