En la jornada final del XIV Encuentro Internacional de Economistas sobre Globalización y Problemas del Desarrollo se analizó la validez, cuatro décadas después del libro La crisis económica y social del mundo, concebido por Fidel desde su pensamiento marxista y publicado en 1983 en un complejo contexto que ya presagiaba el agravamiento del orden económico global.
Al valorar el contenido y vigencia de las ideas expuestas en el texto, Díaz-Canel afirmó que consiguieron una movilización internacional a partir del concepto del líder histórico de que las batallas contra la neocolonización se ganan con cultura y conocimientos, porque en la construcción socialista las personas deben distinguirse por esos dos patrimonios.
El investigador Faustino Covarrubias, del Centro de Estudios de la Economía Mundial, preciso que el libro brinda las armas suficientes para comprender que 40 años después la crisis estructural del capitalismo lo ha convertido en un gigante casino donde manda el capital financiero con una decadencia muy marcada de Estados Unidos como potencia hegemónica.
Consideró en su análisis que incluso el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, acostumbrados a enmascarar realidades, han aceptado y anunciado que lo que está por venir en los próximos años es peor con crecimientos económicos globales por debajo del dos por ciento.
“Junto esa previsión ya se asoma una gran estanflación, o sea inflación con bajo o nulo crecimiento económico, otro elemento que pone al capitalismo en la senda de la crisis global, lo que no significa que se caerá por su propio peso, si no lo tumbamos, advirtió el experto.
Al respecto, invitó a las fuerzas progresistas de los países en desarrollo a intensificar la lucha, por ser las víctimas de siempre, en particular los de América Latina, que acumula ya dos décadas perdidas y los de África, cuya lista de naciones empobrecidas creció significativamente por el actual fallo orgánico y múltiple: económico, energético, alimentario y medio ambiental.
Fidel previó en su libro todos esos elementos, afirmó, y apuntó el fracaso de las políticas neoliberales, por lo que cuatro décadas después lamentablemente la crisis económica mundial no es historia antigua, es una realidad más triste y cruda en un mundo al borde de una guerra nuclear, sentenció Covarrubias.
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