«Estamos profundamente conmocionados y entristecidos por los ataques contra el campamento de refugiados de Jabalia y la escuela administrada por las Naciones Unidas. Condenamos la violencia y los ataques contra civiles y niños», subrayó la vocera de la cancillería, Mao Ning.
En el Día Mundial del Niño, el gigante asiático transmitió su consternación por la muerte de más cuatro mil 600 infantes en el enclave.
La vocera Mao Ning agregó que cerca de nueve mil pequeños resultaron heridos debido al conflicto «y muchos más siguen atrapados en ruinas cuyo paradero se desconoce».
«Instamos a las partes a que apliquen seriamente la resolución adoptada por la Asamblea General de Naciones Unidas en su período extraordinario de sesiones de emergencia y la Resolución 2712 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, observen el derecho internacional humanitario, alcancen un alto el fuego inmediato y protejan eficazmente la vida de los niños y sus derechos e intereses», enfatizó.
El ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, subrayó hoy que el cese al fuego es «una cuestión de vida o muerte para el pueblo de Gaza. Es la necesidad actual del pueblo de Gaza, el deseo de la gran mayoría de los países y la voz unánime de todos los pueblos amantes de la paz en todo el mundo».
El jefe de la diplomacia china hizo estas declaraciones durante un encuentro aquí con su homólogo palestino, Riyad al Maliki, quien forma parte de una delegación de cancilleres de países árabes e islámicos.
Wang urgió a la comunidad internacional a que tome «medidas efectivas» para que la guerra «no avance más» y se comprometió con seguir «entablando conversaciones de paz con múltiples actores».
Por su parte, la delegación destacó el gran número de víctimas civiles en Gaza y agregó que los países árabes e islámicos esperan de China un papel más importante para poner fin a las hostilidades.
La agresión de Israel contra la Franja de Gaza desató una crisis humanitaria sin precedentes y más de 12 mil víctimas fatales.
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