Al recibir al alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, el monarca llamó a ejercer presión para garantizar el suministro de alimentos, medicinas, agua y combustible al enclave costero.
En este sentido, enfatizó en la urgencia de trabajar intensamente para detener la guerra israelí contra ese territorio.
Según la Agencia de Noticias jordana, el gobernante advirtió sobre las desastrosas repercusiones de la guerra en curso, cuyas víctimas son civiles inocentes.
El rey también alertó de las continuas escaladas y la violencia de los colonos israelíes contra los palestinos en Cisjordania ocupada.
Al mismo tiempo, reiteró que la única manera de resolver el conflicto es la solución de dos Estados, que garantice estabilidad y seguridad para todos.
Con anterioridad, el presidente de la Cámara de Representantes de Jordania, Ahmed Safadi, pidió a la Comisión Jurídica revisar los acuerdos firmados con el Gobierno de Tel Aviv y proporcionar las recomendaciones necesarias al respecto.
A inicios de mes, Jordania decidió llamar a consulta inmediatamente a su embajador ante Israel, en protesta por la agresión contra la Franja de Gaza.
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