El encuentro que se extenderá hasta el próximo jueves en la capital de Cataluña fue inaugurado este lunes por el rey Felipe VI, junto al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el titular de la Generalitat, Pere Aragonés.
De los habituales más de 100 mil visitantes al recinto de la Fira de Barcelona, esta vez el aforo de limitó a 35 mil personas con la idea de hacer una suerte de ensayo de cara al cónclave de febrero de 2022. Están ausentes entre otros, gigantes de la tecnología celular como Samsung, Sony, Nokia y Xiaomi, que decidieron no enviar a sus delegados, aunque sí lo hizo el gigante chino Huawei.
Hay medidas de seguridad frente a la Covid-19, con test y uso de mascarillas obligatorios.
Como casi todos los eventos, el MWC de 2020 fue suspendido y la versión de este año es apenas una aproximación de lo que se piensa hacia el futuro, destacó John Hoffman, organizador de la mayor feria tecnológica del mundo.
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