Los militares disparan contra las personas que se mueven en sus proximidades, denunció un corresponsal de la agencia oficial de noticias palestina, quien alertó que 65 cadáveres aún están en el centro médico ante la imposibilidad de enterrarlos.
Los equipos médicos tienen que transportar de seis a siete heridos en cada ambulancia durante las evacuaciones hacia el sur de Gaza, subrayó.
La televisora Al Jazeera informó esta semana que en sus alrededores fueron desplegados decenas de vehículos blindados y artillería, así como numerosos francotiradores en los techos de los edificios cercanos, lo cual dificulta la llega de las ambulancias.
Wafa informó este jueves que las fuerzas israelíes detuvieron al director del Hospital Al-Shifa, Muhammad Abu Salmiya, y a varios miembros del personal durante su traslado a la zona meridional.
El Al-Shifa, el más grande de la Franja, también fue cercado por los militares y se encuentra en proceso de evacuación.
Tanto agencias de la ONU como diversos países y ONG denunciaron esa política del gobierno de Benjamin Netanyahu porque pone en peligro la vida de los heridos, trabajadores de salud y personas desplazadas.
Todos los hospitales del norte de la Franja paralizaron sus labores tras los daños sufridos en los bombardeos o por la falta de combustible debido al bloqueo impuesto por el gabinete de Netanyahu.
Ante la presión internacional y los reiterados llamados de la ONU, en la pasada semana el primer ministro dio marcha atrás y autorizó la entrada limitada de combustible al enclave.
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