El conservador Partido Popular (PP) y la ultraderecha de Vox, principales instigadores de manifestaciones en las calles contra Sánchez, enfocaron ahora su rumbo hacia la UE cuestionando la propuesta de ley de amnistía a los independentistas catalanes.
No parece que tenga mucho recorrido la diatriba dentro del bloque comunitario, pero al mismo tiempo sí que han logrado mantener en permanente crispación a la política en España.
Sánchez se enfrentará a su primera prueba de fuego en el pleno del Congreso el 20 de diciembre, antes de que finalice el primer periodo de sesiones de la Cámara Baja.
Ayer, el jefe del Ejecutivo llamó a la “unidad y solvencia” en el primer Consejo de Ministros recién conformado, tras su reelección.
Al margen de las polémicas que genera una futura ley de amnistía, el presidente del Gobierno español hizo llegar este miércoles a sus ministros una carta personalizada en la que les pide actuar con ‘unidad y solvencia’.
Sánchez intenta apaciguar un ambiente de protestas contra su pacto con los independentistas catalanes de impulsar una ley de amnistía, rechazada por el conservador Partido Popular (PP), la ultraderecha de Vox, y otro sector de la sociedad civil.
En una carta enviada a sus ministros, subrayó que “este Gobierno no se articula desde la mera conjunción entre las dos fuerzas políticas que lo conforman (…) hace de esa unión su razón de ser, y actuará en consecuencia, desde su pluralidad interna, con unidad, solvencia y determinación (…)”, apostilló.
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