Para nadie aquí es un secreto que el grupo lleva meses recopilando información sobre la viabilidad de la llamada candidatura de unidad en la carrera presidencial del próximo año.
Si bien No Labels aún está evaluando si seguir adelante y cómo seleccionaría candidatos, el anuncio de Manchin de que no buscará la reelección en su escaño del Senado aviva las conversaciones sobre la perspectiva de una campaña independiente.
Manchin, que es amigo del grupo, aseguró que planea viajar por el país y medir el interés en un movimiento político centrista; además, dijo en recientes entrevistas que consideraría postularse para la Casa Blanca.
El demócrata de Virginia Occidental expresó a CBS News la semana pasada que cree que hay “mucho tiempo” para decidir si se postulará para presidente, y también le dijo a NBC News que consideraría “absolutamente” una oferta para 2024.
El discurso de Manchin sobre una posible candidatura a la Casa Blanca ha puesto el foco de atención en No Labels.
Si bien el destino del esfuerzo de esta agrupación política aún está por determinarse, eso no ha impedido que los críticos hagan sonar la alarma sobre cómo una oferta de un tercero podría marcar la diferencia entre que el presidente Joe Biden gane la reelección y pierda ante el expresidente Donald Trump, el favorito para la nominación del Partido Republicano, advirtió el diario The Hill.
Para no pocos observadores, la presencia de un tercer partido sin etiquetas favorecerá más que todo a Trump.
No Labels se autodefine como un movimiento nacional de estadounidenses (demócratas, republicanos e independientes) «con sentido común que presionan juntos a nuestros líderes para resolver los mayores problemas» del país.
Manchin, quien antes de pasar a la política fue un hombre de negocios que construyó parte de su fortuna como comerciante de carbón al frente de Enersystem, empresa que fundó en 1989, ha sido uno de los obstáculos al avance de la agenda de Biden en el Congreso.
En algún momento, medios de prensa ironizaron como el “otro Joe que manda en Washington”, pues en 2021 descarriló el plan original del mandatario conocido como Build Back Better (Reconstruir mejor).
La iniciativa original de Biden terminó diluyéndose en la aprobada Ley de Reducción de la Inflación de 2022, que incorporó algunas de las propuestas de cambio climático, atención médica y reforma fiscal de Reconstruir mejor, pero dejó fuera importantes programas sociales.
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