El medio noticioso condenó la muerte ayer de su camarógrafo Samer Abudaqa por un ataque israelí contra la ciudad de Khan Yunis, en el sur del enclave costero, donde viven más de dos millones de palestinos.
Muchos otros resultaron heridos, entre ellos Wael Dahdouh, jefe de la oficina de la cadena en Gaza, cuya familia murió en una incursión anterior, subrayó.
Al Jazeera denunció en un comunicado que el Ejército de la vecina nación tiene como objetivo a los comunicadores palestinos y a sus familias en ese territorio.
Por su parte, su colega Wael Dahdouh, corresponsal de Al Jazeera, relató el ataque israelí que lo hirió y mató a su colega Abudaqa.
Desde una cama en el hospital en el Hospital Nasser en Gaza, Dahdouh destacó que la ambulancia que lo transportaba no pudo recoger a Abudaqa por temor a un nuevo bombardeo.
“Nos subimos a la ambulancia, les pedí que regresaran porque Samer todavía estaba allí y estaba gritando y pidiendo ayuda (…) pero los paramédicos me dijeron que teníamos que irnos de inmediato y que enviarían otro vehículo para que no nos atacaran a todos».
Este sábado el Canal 12 reportó que dos policías israelíes fueron suspendidos por golpear en Cisjordania a un fotoperiodista turco que trabaja para la Agencia Anadolu.
Desde el inicio de la actual ola de violencia, Israel lanzó ataques contra medio centenar de sedes de instituciones del sector, incluidas las oficinas de Al Jazeera, de Palestina TV, de las agencias de noticias Maan, así como de los periódicos Al Quds y Al Ayyam, según el Comité de Libertades del Sindicato de Periodistas Palestinos.
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