‘Esta historia de las denominaciones es muy vieja, es una historia que venía de los tiempos soviéticos. La ley ha sido aprobada, debe cumplirse’, indicó el jefe de prensa de la Presidencia.
Las enmiendas a la ley vinícola aprobadas el pasado viernes por el presidente ruso, Vladimir Putin, establecen que el nombre de champaña solo se utilizará para la bebida de ese tipo, pero de producción nacional, mientras las importaciones francesas deberán ser etiquetadas como ‘vino espumoso’.
Ante la decisión, Francia decretó el freno de las exportaciones a Rusia de las famosas marcas de champaña Moet y Chandon; Veuve Cliquot y Dom Perignon, mientras este lunes la Unión Europea manifestó su desacuerdo con las enmiendas de la ley rusa.
‘Haremos todo lo necesario para expresar nuestro desacuerdo y preocupaciones al respecto’, dijo el portavoz de la Comisión Europea, según la agencia de noticias Sputnik.
El director de la Unión de Casas de Champagne, David Chatillon, no excluyó la suspensión de suministros de la bebida francesa a esta nación.
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