De acuerdo con la Cancillería qatarí, el pacto incluye la introducción de medicinas y ayuda a los civiles en la Franja, a cambio de hacer llegar tratamientos a los prisioneros israelíes en poder de la resistencia palestina.
El Ministerio de Asuntos Exteriores precisó que los medicamentos y los auxilios llegarán a la ciudad egipcia de Al-Arish a bordo de dos aviones de las Fuerzas Armadas de Qatar, como preparación para su transferencia a la Franja.
A la luz de este anuncio, las fuerzas israelíes cometen masacres contra civiles en el enclave costero e impiden acceso al agua, las medicinas y los alimentos.
Instituciones y organismos internacionales advirtieron sobre la continuación de la situación en la Franja de Gaza y calificaron de guerra genocida la postura israelí, en complicidad con Estados Unidos y las potencias occidentales.
La coordinadora de la organización Médicos Sin Fronteras, Guillemette Thomas, subrayó que el horror en la Franja llegó a tal punto que no tiene palabras para describirlo.
En esta misma línea, un grupo de ocho relatores independientes de Naciones Unidas consideraron la agresión israelí en Gaza como una atrocidad consumada desde hace mucho tiempo con la ocupación y el bloqueo.
Tras más de tres meses de asedio total, la crisis se acelera como parte de un proceso continuo, agregaron al insistir en la necesidad de un alto al fuego.
Los habitantes de la Franja representan el 80 por ciento de la población que enfrenta hambruna o hambre catastrófica en el mundo.
El informe de los expertos reflejó que el asedio total iniciado en octubre pasado somete a 2,3 millones de palestinos a la falta de agua, combustible, medicinas y suministros médicos, tras 17 años de bloqueo israelí que impusieron a la mitad de la población gazatí una situación de inseguridad alimentaria.
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