De acuerdo con una nota publicada en el sitio oficial de la cancillería italiana, en el diálogo ambas partes abordaron los últimos acontecimientos en Medio Oriente y coincidieron en la necesidad de evitar una regionalización del conflicto.
Durante la conversación telefónica, que tuvo lugar la víspera, Tajani resaltó la importancia de fortalecer la relación entre Roma y Berlín a nivel bilateral y en el seno de la Unión Europea (UE), la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y en particular en el Grupo de los Siete (G7), cuya presidencia ocupa este año Italia.
El canciller italiano destacó que “hablé con la ministra Baerbock sobre las prioridades de la presidencia italiana del G7. Tenemos una visión común sobre muchos expedientes y estoy seguro de que nuestro espíritu de colaboración contribuirá a elevar aún más el nivel de coordinación y cohesión entre los socios”.
“Primero abordamos la cuestión de la seguridad de la navegación en el mar Rojo y el conflicto en Gaza. Garantizar la libertad de navegación y la seguridad del comercio marítimo es una prioridad para nosotros, especialmente para dos potencias exportadoras como Italia y Alemania”, dijo, y añadió que en el diálogo se evaluaron opciones operativas.
En relación con el conflicto israelí-palestino, ambos ministros coincidieron en la necesidad de “sentar las bases de un camino concreto hacia la paz y proporcionar asistencia humanitaria a la población civil de Gaza”, donde ya murieron más de 25 mil personas víctimas de los bombardeos de Tel Aviv, agrega la fuente.
En cuanto a la situación en el mar Rojo, Italia apoya una operación naval de la Unión Europea (UE) para colaborar con la misión Guardián de la Prosperidad, liderada por Estados Unidos, con una extensión de la misión Atalanta, creada para dedicada a luchar contra los piratas somalíes, según afirmó el ministro de Defensa, Guido Crosetto.
La puesta en marcha de esas acciones se evaluará durante la reunión del Consejo de ministros de Asuntos Exteriores de la región, que se celebrará el 22 de enero en la sede del organismo en Bruselas, Bélgica y, en criterio de observadores, las operaciones navales de la UE en esa zona podrían comenzar el próximo mes de febrero.
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