La Cancillería aseguró que no hay mercenarios franceses “ni en Ucrania ni en ningún otro lugar” y acusó a Moscú de manipulación.
No hay que dar importancia a estas informaciones, al igual que a las anteriores y a las que vendrán, reaccionó en una declaración.
La víspera, el Ministerio de Defensa ruso había señalado el ataque en Járkov y la neutralización de más de 60 combatientes foráneos, muchos de ellos galos.
Por su parte, la vocera de la diplomacia rusa, María Zajárova, anunció que el embajador francés Pierre Lévy fue llamado a consulta tras esa noticia.
Francia negó la presencia de mercenarios en Ucrania, pero sí reiteró su decisión de mantener el envío de armas a ese país, pese a las advertencias de Moscú de que los artefactos bélicos de occidente solo atizan el conflicto.
Según la Cancillería, después del anuncio hace dos días por el presidente Emmanuel Macron del envío de 40 misiles de largo alcance Scalp y de bombas, el ministro de Defensa, Sébastien Lecornu, lanzó hoy la “coalición de artillería”, una iniciativa de liderazgo franco-estadounidense para armar a Kiev.
En particular, Lecornu informó el desbloqueo de 50 millones de euros para el suministro a Ucrania de 12 cañones Caesar, un obús autopropulsado de 155 milímetros que ya ha sido despachado por París hacia la zona de conflicto.
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