Bukele, que llegó junto a la primera dama, Gabriela de Bukele, fue recibido con una enorme ovación por parte de la población que se encontraba votando y rodeado de un nube de seguidores, periodistas y un enorme dispositivo de seguridad depositó sus boletas en el centro ubicado en la Avenida Olímpica.
Fuegos artificiales, una música intensa y la algarabía de seguidores acompañó la estancia del mandatario que luego viajó a un céntrico hotel de esta capital, el Sheraton, para dar una conferencia de prensa.
La llegada de Bukele fue aguardada por más de 300 periodistas y fotógrafos que intentaban capturar imágenes de un momento que muchos califican de histórico porque por primera vez en más de 80 años un presidente busca la reelección en El Salvador.
Desde horas tempranas, cientos de seguidores, policías y fuerzas especiales estaban desplegados en varias cuadras de la Avenida Olímpica esperando el arribo de Bukele, quien llegó cerca de las tres de la tarde a ejercer su derecho al voto.
Los salvadoreños demostraron su respaldo al mandatario mientras realizaba el sufragio ante la junta receptora de votos 1725.
Bukele compite por un nuevo mandato en estas elecciones presidenciales y legislativas, con un enorme respaldo de la población, tanto dentro como fuera del país, gracias a las políticas acertadas en materia de seguridad.
Según encuestas, Bukele, expublicista de 42 años, tiene casi garantizado un segundo mandato de cinco años, con una abrumadora popularidad del 90 por ciento.
Los salvadoreños votan este domingo en unos comicios que se espera que le darán la reelección y un mayor poder al mandatario.
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