En declaraciones a la prensa local durante una visita al conjunto escultórico de Sambek, en la región de Rostov, el diplomático dijo que Rusia defiende una solución política en Afganistán basada en las decisiones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
»Estamos a favor de que el arreglo afgano tenga lugar con la participación de todas las fuerzas políticas, étnicas y confesionales del país’, señaló.
El ministro de Asuntos Exteriores lamentó que las negociaciones iniciadas terminaran estancándose. ‘La delegación del Gobierno lleva un año y medio o dos sin estar muy interesada en que se reanuden las negociaciones’, subrayó, según la agencia de noticias TASS.
‘En este contexto, por desgracia, los talibanes decidieron tratar de resolver la situación por medios militares. Están conquistando más y más ciudades y condados. Todo eso es malo e incorrecto’, indicó.
Lavrov señaló que Moscú está en contacto con todas las fuerzas políticas en Afganistán: el Gobierno, los talibanes y los representantes de uzbekos y tayikos. ‘Vemos lo difícil que es para la sociedad afgana formar un consenso’, comentó.
En tal sentido, subrayó la relevancia del papel de los mediadores internacionales para encontrar una salida al conflicto.
‘Esto es lo que persiguen nuestros esfuerzos de la llamada troika (Rusia, Estados Unidos y China) y la troika ampliada con participación de Pakistán. Estamos interesados en que los iraníes se incorporen y luego otros países, en particular India’, agregó.
Para Lavrov, la convocatoria urgente al Consejo de Seguridad de la ONU, solicitada por los representantes de Afganistán, solo sería útil si ayuda a iniciar negociaciones prácticas sobre la situación en este país.
Resaltó la importancia de esta posible reunión si se efectúa con el objetivo de iniciar negociaciones concretas y no para discutir sobre el problema y culparse unos contra otros.
Hasta el momento, los talibanes controlan del 60 por ciento al 85 por ciento del territorio afgano, según fuentes diversas, incluidos territorios considerables de la frontera del país con Irán, China, Pakistán, Tayikistán y Turkmenistán.
La víspera, proclamaron la toma de varias de las ciudades más grandes de Afganistán, incluidas Kandahar y Herat.
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