Durante el intercambio en Moscú, el mandatario anfitrión destacó que las autoridades de ambos países coordinan constantemente su política de seguridad, lo cual es de particular importancia luego de la toma del poder por el movimiento Talibán en Kabul.
Aseguró que el tema será abordado en próximas reuniones de las naciones miembros de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) y de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), indicó el servicio de prensa del Kremlin.
Al respecto, Tokáyev manifestó el interés por conocer la posición de Rusia sobre ‘lo que está sucediendo en este país que tanto ha sufrido, para así llevar a cabo nuestra política de una manera coordinada, desde una postura común’, apuntó.
Acerca de los vínculos económicos y comerciales entre Moscú y Nursultán, Putin explicó que la pandemia de Covid-19 provocó una disminución del intercambio del cuatro por ciento en 2020, pero en la primera mitad de este año el comercio creció más del 33 por ciento.
‘Cooperamos activamente en organizaciones internacionales, incluidas nuestras asociaciones, me refiero a la OCS y al Consejo Económico Euroasiático’, resaltó el jefe de Estado ruso, quien llamó la atención sobre el progreso y el fortalecimiento de la cooperación en todas las áreas.
Por su parte, el presidente kazajo subrayó que ambas naciones dialogan y trabajan de forma constante en temas de la agenda internacional, los problemas de seguridad y sobre la cooperación bilateral.
‘Es gratificante que las relaciones entre nuestros países se desarrollen con éxito en un espíritu de asociación estratégica, de forma dinámica’, dijo Tokáyev.
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