La gente enfrenta problemas más graves tras el cierre de las operaciones bancarias y del mayor mercado de cambio de dinero en Kabul, indicó la agencia de noticias The Khaama Press.
Muchas personas tienen su dinero en cuentas bancarias pero no tienen acceso a ellas, lo cual duplica sus problemas diarios, acotó la fuente.
Otro asunto complicado es el pago de los salarios a los empleados de las organizaciones privadas y a los funcionarios del gobierno, agregó.
Los propietarios de organizaciones privadas tienen dinero en sus cuentas pero debido al cierre bancario no pueden pagar a sus empleados, lo cual dejó a miles de personas en el limbo.
Los funcionarios del Gobierno también están en una profunda incertidumbre, pues ya están a fin de mes y no hay pistas sobre sus cobros.
Por otro lado, dado que el mercado de cambios depende directamente del banco central de Afganistán, permanecerá cerrado a menos que dicha entidad reanude sus operaciones.
El Emirato Islámico de Afganistán calla sobre la reapertura de los bancos en el país y los prestamistas privados dijeron que permanecerán cerrados indefinidamente.
La situación golpea a la clase más pobre de la sociedad afgana pues los precios de los productos y alimentos se disparan día tras día.
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