El calendario contempla para mañana el inicio de las clases de educación primaria, y el viernes el comienzo de los estudiantes del ciclo de secundaria, todas ellas de forma presencial y con la obligatoriedad de mascarilla protectora desde el primer curso.
El protocolo sanitario puesto en marcha por el Ministerio de Educación permite acoger a todos los alumnos en las aulas, y en caso de detectarse algún caso positivo de Covid-19 se procederá al cierre de la clase, en el nivel de primaria, o al aislamiento durante una semana para los alumnos no vacunados, en el caso de secundaria.
Los profesores dudan de la idoneidad de las medidas pues ven probable ‘que la escuela se vea alterada desde las primeras semanas con una fuerte circulación de la variante Delta’, declaró a la prensa la secretaria general del principal sindicato del sector (Snuipp-FSU), Guislaine David.
Igualmente señaló que con respecto a los comedores ‘no hay normas suficientemente definidas y estrictas, mientras que será necesario garantizar el distanciamiento físico y evitar las aglomeraciones’, incluso en el patio y sin obligatoriedad de portar máscara ‘los alumnos se juntan, juegan muy cerca, más que si estuvieran en la calle’, añadió.
Si bien los profesores no están aún obligados a vacunarse para desarrollar su actividad, la tasa de vacunación es bastante alta, con un 78 por ciento de docentes que ya tienen el calendario completo y un 11 por ciento a la espera de su segunda dosis, informó el ministro de Educación, Jean-Michel Blanquer.
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