Según informes, la concentración será cerca de la parte oeste del Capitolio, organizada por Look Ahead America, que dirige Matt Braynard, un exmiembro del personal de la campaña electoral de Trump, y contará con la presencia de ‘entre 300 y 500 asistentes al evento, incluyendo miembros de grupos de extrema derecha como Proud Boys y Oath Keepers’.
Varios integrantes de esas dos organizaciones fueron acusados de delitos penales relacionados con la insurrección del pasado 6 de enero.
Incluso se espera la participación de algunos prominentes republicanos de extrema derecha de la Cámara de Representantes que dieron su respaldo y simpatía a los imputados por la violencia desatada en la sede legislativa hace ocho meses.
Entonces cientos de personas invadieron el Capitolio, forzaron la evacuación del Congreso y retrasaron el recuento de los votos del Colegio Electoral que certificarían la derrota del republicando y el triunfo del demócrata Joe Biden.
Más de 140 policías resultaron heridos en la revuelta, que se saldó con cinco muertos.
La Policía del Capitolio presentará su plan de seguridad esta semana, señaló al diario The Hill una fuente del Congreso, mientras el Departamento de Policía Metropolitana aumentará su presencia en el lugar.
A finales del mes pasado el representante Madison Cawthorn (republicano de Carolina del Norte) describió a los acusados, actualmente bajo custodia de las fuerzas del orden público, como ‘rehenes políticos’ y ‘prisioneros políticos’ que están detenidos para disuadir de futuras protestas.
Esa es parte de la retórica y la promoción de la teoría de la conspiración de que Biden no fue elegido legítimamente, como planteó Trump.
El congresista Eric Swalwell (demócrata de California), uno de los más abiertos críticos de los republicanos que han respaldado las falsas afirmaciones del expresidente sobre las elecciones, dijo que el mitin pretende celebrar ‘a los asesinos de policías’.
‘Solo tenemos que asegurarnos de que, si están listos para ponerse violentos, que estemos listos de nuevo de una manera mejor que el 6 de enero para defender el Capitolio’, subrayó Swalwell.
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