Según informó la oficina del gobernante conservador del Reino Unido, ambos líderes conversaron por teléfono este viernes y reafirmaron la importancia de la relación anglo-francesa y acordaron continuar trabajando juntos, tanto a través de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, como de forma bilateral.
Johnson y Macron destacaron en particular la importancia estrategia de esa cooperación en la región del Indo-Pacífico y en África, donde Londres y París comparten una misión militar en Mali, agregó el comunicado.
La firma la semana pasada de un pacto militar tripartito entre Australia, Estados Unidos y Reino Unido provocó la ira de Francia después que Canberra canceló un contrato multimillonario con una empresa francesa para la compra de submarinos convencionales, y prefirió adquirir naves a propulsión nuclear estadounidenses.
Tras la perder 66 mil millones de dólares, el gobierno francés acusó a sus aliados de traición, llamó a consulta a sus embajadores en Washington y en el país austral, y tildó a los británicos de oportunistas.
Las aguas comenzaron a tomar su nivel a finales de esta semana después que Macron y el presidente norteamericano, Joe Biden, tuvieron una conversación al margen de la Asamblea General de la ONU, y Johnson también instó a los franceses a pasar página en declaraciones a la prensa desde Nueva York.
El Aukus, nombre con el que se conoce la flamante alianza tripartita, además de dejar en la estacada a la compañía francesa fabricante de submarinos despertó una ola de críticas entre el movimiento pacifista mundial ante el temor de que desate una confrontación con China y una nueva escalada de la carrera armamentista.
Además de ratificar la importancia de los lazos franco-británicos, Johnson y Macron abordaron este viernes la forma de detener el cruce de inmigrantes desde Francia hacia Inglaterra a través del canal de La Mancha, las licencias pesqueras y el controvertido protocolo posBrexit para Irlanda del Norte.
De acuerdo con la oficina del primer ministro británico, ambos gobernantes también conversaron sobre la necesidad de aumentar la acción internacional para detener el cambio climático, de cara a la conferencia de la ONU sobre el tema o COP26 prevista para noviembre próximo en Glasgow, Escocia.
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