‘El martes 5 de octubre, el Presidente viajará a Howell, Michigan, para seguir recabando el apoyo del público a su proyecto de ley bipartidista de infraestructuras y a su programa Build Back Better (Reconstruir mejor)’, dijo la mansión ejecutiva en comunicado difundido la noche de este domingo.
La agenda Build Back Better incluye 550 mil millones de dólares de nuevo gasto en un proyecto de ley de infraestructuras y otro paquete de gran alcance para temas como el cuidado de los niños, la ampliación de las prestaciones de salud y las iniciativas para combatir el cambio climático.
‘Creo que puedo conseguirlo’, comentó Biden antes partir el sábado pasado rumbo a Delaware, un día después de su reunión con los demócratas moderados y progresistas del Congreso con el objetivo de buscar un punto común para hacer avanzar su agenda doméstica.
Cuando se le preguntó después de ese encuentro cuándo se aprobarían las iniciativas legislativas, el mandatario señaló a los periodistas que ‘no importa si es en seis minutos, seis días o seis semanas. Vamos a conseguirlo’.
Por su parte, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-California), retrasó la semana pasada la votación del proyecto de ley de infraestructuras porque seguían los desacuerdos sobre el paquete de reconciliación más amplio.
Ella y el líder de la mayoría del Senado, Charles Schumer (D-Nueva York), afirman ahora que quieren aprobar ambos proyectos antes de finales de octubre, reseñó el diario The Hill.
Aunque prometió unir al país y desempeñar un gobierno competente, los continuos reveses sufridos por Biden en los últimos dos meses colocaron en campo minado sus índices de aprobación aquí.
Varias encuestas reflejan la caída en los números para el ocupante del Despacho Oval: Ipsos le da un 46 por ciento; Rasmussen Reports/Pulse Opinion Research (42); Morning Consult (49) y YouGov (40).
Mientras un sondeo de The Associated Press-NORC Center for Public Affairs Research arrojó la víspera que un 50 por ciento de los entrevistados avala la gestión de Biden contra el 54 por ciento en agosto y el 59 por ciento en julio.
Los factores que influyeron en el cambio de opinión fueron, entre otros, la forma caótica de la evacuación de Afganistán, la represión de la Patrulla Fronteriza contra los migrantes haitianos, el rebrote de la Covid-19 y la batalla legislativa en un Congreso a todas luces dividido.
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