Un reporte del diario The Hill indicó que el DOJ creará un grupo de trabajo para determinar cómo podrían utilizarse las herramientas federales de aplicación de la ley para perseguir la conducta criminal hacia el personal docente.
Además, establecerá grupos especializados de orientación para ayudar a los miembros de los consejos escolares y a otras víctimas potenciales a entender cómo proceder ante cualquier amenaza.
Según un comunicado de la dependencia gubernamental citado por el periódico, presentarán una serie de esfuerzos ‘en los próximos días’ para hacer frente a la creciente conducta criminal ‘dirigida hacia el personal de las escuelas’.
El anuncio se produce después que la Asociación Nacional de Consejos Escolares (NSBA) pidiera al presidente Joe Biden ‘asistencia inmediata’ para ayudar a profesores, miembros de los consejos escolares y estudiantes que han recibido intimidaciones por los mandatos de las mascarillas y la teoría racial crítica.
En su carta, la organización señaló que las fuerzas de seguridad de algunas comunidades necesitaban apoyo adicional para controlar los niveles de coacción.
La agrupación solicitó específicamente recursos al DOJ, al FBI, al Servicio Secreto, al Departamento de Seguridad Nacional y al Servicio de Inspección Postal.
Chip Slaven, director ejecutivo interino de la NSBA, afirmó que la decisión envía un ‘fuerte mensaje a los individuos con intenciones violentas que se centran en causar el caos, perturbar nuestras escuelas públicas y abrir brechas entre los consejos escolares y los padres, los estudiantes y las comunidades a las que sirven’.
Un memorando del fiscal general Merrick Garland fechado este lunes se refirió a un ‘pico preocupante en el acoso, la intimidación y las amenazas de violencia’ contra los maestros y otro personal escolar que ‘participan en el trabajo vital de dirigir las escuelas públicas de nuestra nación’.
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