Ambos acuerdos surgieron durante la primera visita oficial del presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, a esta vecina nación centroamericana, durante la cual se reunió con su homólogo y anfitrión, Nayib Bukele.
Del encuentro destacó la firma de un convenio para que los vuelos entre ambos países sean considerados domésticos, lo que reducirá costos y tiempos, lo cual será replicado en breve en el transporte por tierra.
Los mandatarios instruyeron a sus respectivos encargados de fronteras y migración para que eliminar en menos de un mes las restricciones para el tránsito de personas entre ambos países.
Giammattei se comprometió además a no detener a los salvadoreños en su camino al norte, y criticó «los muros» que impiden el libre tránsito, y que «no detendrán la migración, sino únicamente la prosperidad».
El jefe de Estado guatemalteco consideró además justo y correcto que El Salvador cuente con una salida al Atlántico, algo que, según Bukele, «marcará un antes y un después en la verdadera unión de Centroamérica».
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