Para la entidad, se trata de un número histórico que supera los de la crisis del año 2002, y entre otras cosas porque actualmente hay un nivel de trabajo legal mucho mayor al de aquella época, después de los 15 años de gobierno de Frente Amplio transcurridos.
Desglosadas las solicitudes a consideración del BPS, casi 59 mil son por el causal de suspensión, más de cinco mil debido a despido y una cifra parecida por la reducción de la actividad laboral.
Todavía falta el registro de seguro de paro especial de por lo menos 30 días que dispuso el Ministerio de Trabajo, al calor de la expansión en el país del Covid-19, como medida de emergencia.
Las actividades económicas con más pedidos del Subsidio por Desempleo son las del comercio, mayor y menor, con 16 mil 725 solicitudes, seguidas con las de la industria manufacturera, alojamiento y gastronomía.
Se estima que al concluir marzo esa categoría de solicitudes habituales, superarán en cinco veces la de cualquier mes previo que en el peor de los casos podría llegar a 14 mil.
Para entonces se conocerá el número de beneficiarios cuando el BPS haga los estudios correspondientes de cada caso, justo se tenga otras certezas sobre previsibles estragos económicos y sociales de la pandemia.
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