Respecto al saneamiento en esa misma área, el salto en los últimos 13 años fue del 36 al 52.5 por ciento, precisó Virgilio Bravo, director del Nuevo FISE (Fondo de Inversión Social de Emergencia) en declaraciones a una televisora, citadas por el boletín digital Informe Pastrán.
En el período de referencia, que coincide con la segunda etapa del Frente Sandinista en el poder, ese fondo desarrolló casi 300 proyectos, tras una inversión de 27 millones de dólares.
Tal beneficio alcanzó a más de 25 mil familias en el campo nicaragüense, que en su total suman alrededor de 125 personas, en el caso del agua potable, mientras en saneamiento más de 67 mil pobladores recibieron el servicio.
El objetivo de nuestro gobierno es llevar más agua a las zonas rurales, que nadie se quede sin el vital líquido en esas áreas, expuso Bravo.
Insistió en el interés de avanzar en la proyección universal y equitativa del agua y saneamiento, mediante la mejoría de la calidad del líquido destinado al consumo humano, agregó el directivo.
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