En un comunicado, la organización de la ONU especializada en temas de educación, ciencia y cultura precisó que su directora general, Audrey Azoulay, recibió en esta capital a los embajadores de ambos países el miércoles, a quienes ofreció oficialmente asistencia técnica.
De acuerdo con la Unesco, aún no ha podido visitar ese territorio, pese a sus intentos, lo cual podría ayudar en la elaboración de un inventario preliminar de los bienes culturales más importantes, con el visto bueno de las partes.
El inventario constituye un requisito previo para la protección efectiva del patrimonio de la región, detalló.
A propósito del conflicto en Nagorni Karabaj, Azoulay recordó recientes declaraciones del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para expresar alivio por el acuerdo de un alto el fuego, anunciado por Armenia, Azerbaiyán, Alemania y Rusia.
La directora general también reafirmó la dimensión universal del patrimonio cultural, su carácter de testigo de la historia y parte inseparable de la identidad de los pueblos y el deber de la comunidad internacional de protegerlo y preservarlo para las generaciones futuras.
En ese sentido, insistió en las disposiciones de la Convención de 1954 para la Protección de los Bienes Culturales en caso de Conflicto Armado y sus dos Protocolos, de los que son parte tanto Armenia como Azerbaiyán, y en la resolución 2347 del Consejo de Seguridad de la ONU.
La iniciativa adoptada por el Consejo en 2017 establece el peligro para la reconciliación que deriva de la destrucción ilícita del patrimonio cultural, así como del saqueo y del contrabando de bienes culturales en caso de conflicto armado.
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