La pandemia causada por el coronavirus SARS-CoV-2, cuyo mayor impacto en número de contagios y muertes acontece en este país, ha privado a las agencias de dicho sector de grandes cantidades de ingresos monetarios.
En la ciudad de Boston, Massachusetts, funcionarios de tránsito advirtieron que paralizarán el servicio de fin de semana en los trenes de pasajeros y cerrarán los transbordadores.
Por otra parte, publicó el diario The New York Times, 70 de las 110 rutas de autobuses de Atlanta, Georgia, fueron suspendidas, y esa medida podría convertirse en permanente.
También, un plan contempla reducir en 40 por ciento el servicio de metro en Nueva York, que tiene el sistema de transporte masivo más grande de Estados Unidos.
Los profundos recortes que proyectan las agencias podrían obstaculizar la recuperación de las principales ciudades norteamericanas, donde el tránsito confiable constituye la esencia de las economías locales, expuso el periódico.
Recordó que los trenes y los autobuses mueven a los oficinistas, los compradores y los turistas que ayudarán a reactivar las tiendas, los restaurantes, los centros culturales, los hoteles y otros negocios clave afectados por la Covid-19.
A juicio de diversas voces, resulta poco probable que el transporte vuelva a los niveles previos a la pandemia, incluso después de que se disponga ampliamente de vacunas eficaces contra el mal.
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