Portavoces de las autoridades sanitarias declararon que la enfermedad fue confirmada por los análisis de laboratorios especializados y declararon la alerta de epidemia en todo el país.
La fuente de los contagios fue localizada en los asistentes al sepelio el 1 de este mes de una enfermera que sucumbió a la enfermedad en la zona suroriental de Gouecké, precisó la Agencia Nacional de Seguridad Sanitaria.
Otras cuatro personas están infectadas en este país del occidente africano con la dolencia, la cual cobra hasta el 90 por ciento de pacientes en su variante hemorrágica y que entre 2013 y 2016 causó más de 11 mil 300 muertes en Liberia, Sierra Leona, Nigeria, Senegal, Estados Unidos, España, Malí y Reino Unido.
Médicos de varios países, entre ellos Cuba, que envió un contingente de su brigada especializada Henry Reeve, trabajaron en coordinación para contener el brote que amenazaba con devenir pandemia y provocar una catástrofe humanitaria en África.
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