En la primera mitad de 2020 decreció la expectativa de vivir más al caer a 77,8 años, cifras similares a 2006, según un informe publicado por el Centro Nacional de Estadísticas de Salud de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés).
Los datos muestran los cambios en este parámetro demográfico, que también ampliaron las desigualdades raciales y étnicas, destaca el documento.
Al comparar las estadísticas con lo sucedido en 2019, la esperanza de vida de las personas negras no hispanas en Estados Unidos disminuyó aproximadamente tres veces más que la de las personas blancas no hispanas, en 2,7 años, mientras se redujo al doble para los hispanos, en 1,9 años.
Las disparidades entre las personas negras y las blancas se habían reducido en los últimos años, pero estas últimas cifras revierten parte de ese progreso, precisa el texto.
Según la entidad, en las últimas cuatro décadas, esa expectativa de vivir más aumentó lentamente, pero rara vez ha disminuido. Entre 2014 y 2017, un período pico de la epidemia de opioides, la esperanza de vida disminuyó un tercio de año, lo que en sí mismo fue significativo.
A juicios de los expertos, consultados por la cadena televisiva CNN, las estimaciones de esperanza de vida antes de 1980 se han medido de manera menos consistente, pero las estadísticas de las caídas en la esperanza de vida después de la Segunda Guerra Mundial oscilan entre menos de un año y tres años.
Con la pandemia de la Covid-19, y los equívocos manejos por parte del anterior Gobierno condujo a que aproximadamente 490 mil personas perdieran la vida a causa de la enfermedad, y los CDC estiman que el exceso de muertes en 2020 será aún mayor.
Un año de esperanza de vida perdido no da una idea real de cuán grave ha sido esto. En realidad, se perdieron millones de años de vida, dijo a CNN Eileen Crimmins, profesora de la Universidad del Sur de California que ha investigado los cambios en la mortalidad. A su juicio, la Covid-19 está en camino de causar más muertes que el cáncer o las enfermedades cardíacas, y eso es importante.
La nación norteamericana se ha mantenido durante meses como epicentro de la pandemia y los datos de la University Johns Hopkins precisan en la actualidad casi 28 millones de personas se han contagiado en el país.
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