El secretario general del Partido Colorado (PC),Julio María Sanguinetti, principal socio de alianza electoral, reiteró su reclamo de un ámbito de debate o discusión colegiada en lugar de un presidencialismo unipersonal.
‘Creemos que eso podría complementar los mecanismos actuales que están en el Parlamento o en el gabinete’, manifestó días después que el oficialista diario El País reveló malestar en las filas del PC por relegamientos en decisiones del Ejecutivo.
A su vez el líder y senador de Cabildo Abierto (CA), Guido Manini,otro integrante de la coalición, coincidió en abogar por un espacio de diálogo entre los cinco componentes, incluidos los partidos Independiente y de la Gente.
Pero también las dirigencias de PC y CA coincidieron por separado en presentar al gobierno propuestas económicas dirigidas a respaldar a las pequeñas y medianas empresas y asistir a sectores más afectados por las consecuencias de la pandemia de la Covid-19.
Sanguinetti sostuvo que todavía el país tiene una capacidad de expansión de gastos de unos 100 millones de dólares más, con lo que se distanció de la orientación presidencial de hacer recortes y priorizar el ajuste fiscal.
Por su parte Manini abogó por más inversiones del Estado y criticó la ‘ortodoxia’ presupuestal enarbolada por la ministra de Finanzas Azucena Arbeleche en medio de una pandemia.
También como en cascada el Partido Independiente que lidera el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, solicitó formalmente al gobierno un subsidio de 100 dólares durante tres meses para alrededor de 300 mil trabajadores informales sin protección de seguro.
Sin embargo, la ceñida cifra planteada resultó por debajo de la propuesta del Frente Amplio desde los primeros meses de la pandemia de otorgar un salario mínimo temporal equivalente a 300 dólares para esa mencionada población vulnerable.
Mieres reportó en la semana que 76 mil trabajadores se encuentran en seguro de paro debido al cierre de enero por el crecimiento exponencial de la pandemia de Covid-19, lo que implicó medidas de restricción y afectación de actividades, principalmente del sector turístico.
La economía de Uruguay emitió nuevas señales adversas con una subida de la tasa de desempleo del 10,5 que reportó el Instituto Nacional de Estadísticas, lo que se tradujo en unas 186 mil personas que buscaban empleo en diciembre de 2020.
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