Al esbozar las prioridades del ejecutivo temporal recién electo, Dbeibah mencionó la lucha contra la Covid-19 y la reconciliación nacional, señaló The Libya Observer.
Según ese periódico, el jefe de Gobierno seleccionado por los integrantes del Foro de Diálogo Político junto a los tres miembros del Consejo Presidencial, reiteró que representará a todos los partidos y tendencias sin importar su ideología o ubicación geográfica, con el fin de fomentar la paz luego de una década de conflicto.
Después de su elección el pasado 5 de febrero, el primer ministro prometió celebrar las elecciones legislativas y presidenciales en diciembre venidero, en busca de una gobernanza unificada.
En octubre de 2020 el Gobierno de Acuerdo Nacional, asentado en el occidente de la nación, y el Ejército Nacional Libio, radicado en el este, decidieron instaurar un cese el fuego por tiempo indefinido, realizar elecciones generales a finales del actual año y escoger a un ejecutivo provisional hasta los comicios.
Desde entonces una comisión militar dialoga con ambas partes a fin de facilitar y supervisar la implementación de la pausa combativa y la aplicación de otras medidas como el gradual desminado del territorio, iniciado por la mediterránea ciudad de Sirte.
En encuentros con varios funcionarios, el nuevo enviado especial de Naciones Unidas (ONU) para Libia, Jan Kubis, pidió respetar el silencio de los fusiles y reiteró el respaldo del organismo que representa al proceso político en marcha.
Además instó a acatar las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU, entre ellas la referida al bloqueo o embargo de armas, encaminada a reducir la violencia.
Los libios han vivido en un polvorín desde que el derrocamiento y asesinato de su líder histórico, Muammar Gaddafi (2011), derivara en una controversial dualidad de poderes, enfrentamientos entre grupos rivales y la proliferación de mafias traficantes de migrantes irregulares, entre otros flagelos, unido a la injerencia foránea.
agp/ap
