El 1 de marzo de 2020 el Ministerio de Salud Pública dio a conocer el primer paciente afectado por el virus en el país.
Se trató de un italiano de 62 años, quien ingresó en un hospital de la provincia de La Altagracia con los síntomas de la enfermedad y posteriormente fue trasladado a la capital del país, lugar donde fue confirmado.
A partir de ese momento, las fuerzas y medios sanitarios fueron desplegadas para dentro de lo posible impedir la extensión de los contagios, sin embargo, como sucedió en el resto del mundo, fue algo complejo y hoy, aunque con mayor control, aún ocupa y preocupa a todos.
El gobierno hizo y hace todo cuánto está en sus manos para que la Covid-19 pase a ser historia, pero esta llegó para hacer mucho daño y convivir con los humanos por un tiempo aún impredecible.
Hasta la fecha tres mil 100 dominicanos murieron por el virus y 239 mil 617 dieron positivo al coronavirus SARS-CoV-2, causante del mal, desde el mencionado día del pasado año.
El mes de agosto de 2020 fue el que tuvo la mayor cantidad de decesos con 568, en tanto durante el año en curso esa cifra bajó y en enero fueron reportadas 129 muertes.
No obstante, el número de contagiados marca otros derroteros y en 2021 hubo récords pues el 4 de enero se reportaron dos mil 43 positivos, el día 8 fueron dos mil 106 y el 15 llegaron a dos mil 370, achacados los incrementos principalmente a las fiestas de fin de año.
Aunque se mantiene tensa la situación y algunos números no bajan, el inicio en esta nación de la Campaña de Vacunación trajo esperanza y estímulo para enfrentar la pandemia y, sobre todo, la población ve la luz al final del túnel.
Lo anterior se une al anuncio hecho por el presidente Luis Abinader el sábado durante su rendición de cuentas ante el Congreso, de que en julio el 80 por ciento de los habitantes de esta nación estarían inmunizados.
Por supuesto, falta ver si la llegada de las vacunas toma su ritmo, los incumplimientos pasan a mejor vida y la logística que debe acompañar todo el proceso no hacen quedar mal al jefe de Estado.
Fue un año duro, triste y lleno de incertidumbres el vivido en el país y todo parece indicar que quedan aún meses difíciles, pero se espera que en 2022, aunque la Covid-19 mantenga su presencia de alguna forma, ceda ante la ciencia mundial y la inmunización prevalezca.
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