Con una votación de 95 a favor y 4 en contra, Rouse –de 57 años– recibió de forma abrumadora el visto bueno de la Cámara Alta para que forme parte del gabinete del presidente Joe Biden.
De esta forma, se convertirá en la primera presidenta negra de la CEA y la cuarta mujer en dirigir ese Consejo, desde que fue creado en 1946.
También será miembro del gabinete de Biden después de que el mandatario elevó ese puesto a su grupo de asesores principales.
Rouse se desempeñó recientemente como decana de la Escuela de Asuntos Públicos e Internacionales de Princeton y fue miembro del CEA durante el mandato de Barack Obama.
Ella asumirá el puesto en un momento crítico para la economía de Estados Unidos, luego de un año de pandemia de Covid-19, 10 millones de empleos perdidos y millones de hogares con problemas para mantener su vivienda y obtener sustento, señala el diario The Hill en su sitio digital.
Además, en estos momentos los demócratas del Congreso presionan para aprobar un proyecto de ley de ayuda económica de 1,9 billones de dólares frente a la Covid-19, el cual busca ampliar los beneficios por desempleo, enviar otra ronda de controles de estímulo y proporcionar ayuda a pequeñas empresas y los gobiernos locales.
Pero la propuesta de Biden para encabezar la oficina de presupuesto de la Casa Blanca no logró el apoyo necesario del Senado y decidió retirar su nominación.
‘He aceptado la solicitud de Neera Tanden de retirar su nombre de la nominación para Director de la Oficina de Gestión y Presupuesto’, informó el presidente norteamericano en un comunicado.
Tengo el mayor respeto por su historial de logros, su experiencia y sus consejos, y espero que sirva en un puesto en mi administración, añadió.
De acuerdo con The Hill, medio especializado en temas del Congreso, Tanden es el primer candidato del gabinete de Biden en ser retirado de la consideración, y esto deviene un golpe temprano para el mandatario demócrata.
La Casa Blanca pasó las últimas dos semanas insistiendo en que había un camino hacia la confirmación de Tanden y prometió luchar por ella, incluso cuando sus perspectivas se atenuaban.
Ahora se espera que sea designada para un cargo administrativo que no requiera la confirmación del Senado.
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