Alrededor de las 06:00, hora local, detonó el artefacto que destruyó varias ventanas del inmueble, mientras no se reportan heridos hasta ahora, según la prensa nacional.
De Jonge calificó de ‘locura’ el atentado y recordó que durante un año el país volcó su confianza en aquellos que enfrentan al virus desde la primera línea de combate.
El departamento de salud pública calificó el hecho de ‘cobarde acto de destrucción, agresivo e intimidatorio’, y exhortó a garantizar la seguridad para el personal sanitario.
Bovenkarpsel está enclavada en una zona que vive hoy uno de los rebrotes más graves del país con cerca de 81 contagios por cada 100 mil habitantes, cuando la media nacional es de 27,2.
Desde la implantación del toque de queda vigente hasta el próximo día 15, grupos opuestos a las restricciones comenzaron una batalla legal que obligó al gobierno a aprobar nuevas leyes para mantenerlo.
Además, sucedieron choques que enfrentaron a agentes antidisturbios con grupos de manifestantes en esta capital y en otras ciudades del país con saldo de decenas de detenidos.
La Covid-19 causó la muerte hasta hoy de 15 mil 649 neerlandeses sobre una población de unos 17 millones de habitantes.
Desde el comienzo de la campaña de vacunación en enero, fueron inmunizados 1,3 millones de personas con al menos una dosis, según las autoridades sanitarias.
agp/ehl