La colaboración salió a la palestra pública durante la asamblea virtual del COI. ‘Estamos agradecidos por la oferta, que está dentro del verdadero espíritu olímpico de solidaridad’, expresó entusiasmado el alemán Bach.
El tema surge en un momento en que el suministro de dosis colma las páginas principales de los medios de prensa y aumentan los cuestionamientos sobre si los atletas deben saltarse el orden de prioridad.
En esa línea, el titular avanzó que el COI entregará dosis adicionales a la población general de los países que tomen parte en el programa y subrayó que serán considerados los competidores de las citas olímpica, paralímpica y de invierno Beijing 2022.
Bach, exesgrimista y campeón bajo los cinco aros de Montreal 1976, también informó que ‘un número significativo de equipos fueron vacunados’ y ‘otras delegaciones tienen el respaldo de sus gobiernos’.
De hecho, en el segundo día de la 137 sesión de la entidad, el directivo volvió a mostrarse muy optimista sobre la disputa de los Juegos de Tokio, cuyo programa para atletas convencionales tiene prevista su inauguración el venidero 23 de julio.
Todo ello sucedió horas después de que el directivo europeo fuese reelecto al frente de la institución casi de forma unánime, pues era el único candidato y obtuvo 93 votos a favor, cuatro abstenciones y uno en contra, para extender hasta 2025 un mandato que inició en 2013.
El dirigente bávaro, de 67 años, asumió así su segundo período al frente del olimpismo mundial en un instante de especial tensión ante el gris panorama deportivo a causa de la pandemia de la Covid-19.
Un contexto que vivió esta semana otro punto álgido, al trascender que Japón no autorizará la presencia de espectadores procedentes del extranjero debido a los temores asociados a la pandemia, según la agencia local Kyodo.
Sin embargo, el ministro portavoz del gobierno, Katsunobu Kato, salió al paso de los rumores: ‘aún no se ha tomado una decisión al respecto’, pero añadió que el escenario ‘se ve complicado por el riesgo de propagación’ de las variantes del coronavirus, cuando la misión es velar por ‘la seguridad del pueblo’.
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