Según la octava edición de la Investigación Fórum, en colaboración con la empresa encuestadora de mercado Offer Wise, Lula también estaría por delante en la primera ronda en un escenario más concentrado con solo cuatro candidatos, siendo los otros dos el político Ciro Gomes y el gobernador de Sao Paulo, Joao Doria.
En una posible segunda vuelta electoral, el fundador del Partido de los Trabajadores (PT) tendría un 38 por ciento de los votos y el exmilitar un 33,8. El sondeo se realizó por Internet con una metodología de panel online.
Llama la atención que las mujeres resultan más decisivas y entre ellas un 45,6 por ciento votaría por el exlíder metalúrgico y solo un 24,6 respaldaría al gobernante ultraderechista.
De acuerdo con la pesquisa (cuando se presentan los nombres a los encuestados), un 31,2 por ciento dijo que votaría por Lula en la primera vuelta.
Bolsonaro tiene un 30,7 por ciento de las intenciones de voto; Ciro Gomes un 7,4 y Doria, 6,4. No votarían a ninguno un 24,3 por ciento de los interrogados.
En un segundo escenario también estimulado, todavía en primera vuelta, pero con más candidatos, Lula y Bolsonaro están técnicamente empatados.
Aparece el excapitán del Ejercito con un 29,2 por ciento, el exdirigente obrero (27,1), el exjuez Sérgio Moro (7,8), el presentador Luciano Huck (6,8), Gomes (6,1) y Doria (4,9). Un 14,6 por ciento manifestó no votar por nadie.
También el PT lidera entre los más jóvenes, especialmente entre los que fueron niños durante el Gobierno de Lula (2003-2011).
Entre los de 16 y 24 años, el 51,9 por ciento votaría por el exjefe de Estado y un 24,6 por el exoficial.
En la serie histórica de la segunda vuelta, Lula perdía frente a Bolsonaro en octubre y noviembre de 2020, pese a mostrar un crecimiento del 25,2 al 29,5 por ciento.
Sin embargo, ahora en marzo alcanzó un 38 por ciento, mientras el actual ocupante del Palacio de Planalto (sede del Poder Ejecutivo) cayó del 43 en octubre al 33,8 por ciento en este mes.
Analistas aseguran que Lula regresó con fuerza a la escena política tras un juez de la Corte Suprema decidiera el 8 de marzo anular sus condenas relacionadas con la desactivada operación Lava Jato y el expresidente pronunciar después un histórico discurso que sacudió a la sociedad brasileña.
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