‘Vacunada. Primera dosis de la Coronavac. Vacúnense. Cuídense’, escribió Rousseff, de 73 años, en redes sociales tras el hecho en Porto Alegre, capital del estado Rio Grande do Sul, que comenzó este lunes a inyectar a la población de esta edad.
Antes que ella, se pusieron el antídoto el exgobernante Michel Temer, de 80 años; Luiz Inácio Lula da Silva, de 75; Fernando Henrique Cardoso, de 89; y José Sarney, de 90. Fernando Collor de Mello, de 71 años, el expresidente más joven, es el único que no se ha vacunado.
El portal de noticias G1 indicó que, en Estados Unidos, epicentro global del coronavirus SARS-CoV—2, los expresidentes se unieron para promover la vacunación.
A excepción del republicano Donald Trump, todos se pusieron el fármaco ante cámaras para ayudar a promocionar la campaña de vacunación en ese norteño país.
Hace cuatro meses, el jefe de Estado Jair Bolsonaro, de 66 años, dijo que no se vacunará. Sin embargo, el 5 de marzo, en conversación con partidarios, admitió la posibilidad.
‘Estoy vacunado, que otro se vacune en mi lugar. Ahí, enfrente, después de que todo el mundo tome, si yo decido -porque depende de mí, es voluntario, no se puede obligar a nadie-, voy a tomar’, comentó.
Bolsonaro ya contrajo la Covid-19 y suele afirmar que, por tanto, está inmunizado, aunque hay muchos casos de reinfección.
Con la mayor media móvil de nuevos casos en el mundo, Brasil rebasó hasta la fecha los 295 mil muertos y los 12 millones de contagios por el virus.
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