Según ese documento, ese año las autoridades confiscaron 35,3 toneladas de hachís y 10 de cocaína, cifras superiores a las de 2019.
Además, decomisaron 42,2 kilogramos de heroína y 24 mil 263 pastillas de éxtasis.
Entre los detenidos por su implicación en el comercio ilegal de esas sustancias se encuentran 279 mujeres y 401 menores de 21 años.
De acuerdo con el informe, la mayor parte de las drogas fue transportada por vía marítima, aunque también se emplearon medios terrestres.
Por otra parte, fue detectado el incremento del uso de plataformas digitales y servicios de entrega rápida para contactar y hacer llegar los estupefacientes a los compradores, debido a la vigencia de restricciones para contener la pandemia de la Covid-19.
El reporte indica que el narcotráfico es una de las principales formas de actuación del crimen organizado en este país que recibe elevadas cantidades de hachís desde Marruecos y de cocaína desde Latinoamérica.
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