El portal Consultor Jurídico precisó que los abogados de Lula pretenden que tal determinación de arbitrariedad de Moro se aplique a otras acciones presentadas contra el exgobernante en el décimo tercer Juzgado Penal Federal de la sureña ciudad de Curitiba.
La sospecha sobre Moro fue reconocida por el Supremo en el proceso del apartamento triplex de la ciudad costera de Guarujá, en el interior de Sao Paulo.
Con el fallo de la segunda sala se anularon todas las condenas impuestas por el exministro de Justicia mientras era juez federal en el caso Guarujá, incluidos los de la fase preprocesal.
Hasta entonces, la decisión del ministro Luiz Edson Fachin, de la corte superior, invalidó las decisiones del tribunal penal de Curitiba en los casos de Lula, al reconocer la incompetencia de la audiencia.
Sin embargo, Fachin preservó las violaciones del secreto, las interceptaciones y el material resultante de registros e incautaciones.
De acuerdo con el equipo jurídico del fundador del Partido de los Trabajadores, la sospecha también debe extenderse a los procesos relacionados con la sede del Instituto Lula, aun sin laudo, y el sitio Atibaia, en el cual el exdirigente obrero fue condenado, ambos dirigidos por Moro.
La defensa señala que la sospecha sobre el exmagistrado tuvo una repercusión decisiva en las dos acciones, porque transcurrieron de forma contemporánea.
Recientemente el ministro del Supremo Luiz Fux fijó para el 14 de abril el juicio contra la decisión que anuló las condenas.
Los recursos fueron interpuestos por la Fiscalía contra el veredicto de Fachin, quien el 8 de marzo no solo invalidó las sanciones, sino que ordenó la transferencia de los procesos de Paraná al Distrito Federal.
Tal resolución devolvió al expresidente sus derechos políticos y la posibilidad de participar en la carrera por el poder en las elecciones del próximo año.
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