Sureste fue el departamento más afectado con 12 terremotos reportados, seguido de Nippes (11), además de Noroeste y Oeste con siete sismos, respectivamente.
Préptit precisó que Nippes, situado a unos 115 kilómetros al suroeste de esta capital, sufrió una pequeña crisis sísmica el 23 de febrero pasado, cuando fue epicentro de cuatro movimientos telúricos con magnitudes de 3,3 y 4,2 en la escala abierta de Richter, sin embargo la actividad sismológica ya regresó a la normalidad.
Haití está situado sobre la convergencia de varias placas tectónicas, lo que lo hace proclive a fenómenos de este tipo.
Solo en 2020, el Buró de Energía registró 499 terremotos de poca intensidad, que van de uno a 4,9 grados en la escala de Richter, principalmente en los departamentos Sureste y Noreste.
Prétit insistió anteriormente en que el país necesita aún mayor preparación para enfrentar estos fenómenos, aunque se avanzó en los últimos años en la capacitación de especialistas y la identificación de fallas sísmicas.
La nación caribeña cuenta con 27 mil 750 kilómetros cuadrados de superficie, y de ellos solo 200, el 0,7 por ciento del total, fueron objeto de microzonificación sísmica, lo cual deja un amplio territorio sin investigar.
El geólogo también alertó sobre el irrespeto a los códigos de construcción, que resultó una de las principales causas para el desplome de la mayoría de las infraestructuras en 2010.
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