De acuerdo con el mandatario, ningún norteamericano trabajador debería perder un solo dólar de su sueldo porque elige cumplir con el deber patriótico de vacunarse.
Hago un llamado a todos los empleadores, grandes y pequeños, en todos los estados para que les den a los contratados el tiempo libre con remuneración que necesitan, afirmó el gobernante en un discurso en la Casa Blanca.
Además, sugirió que se mantenga el salario en cualquier momento que los trabajadores estén obligados a recuperarse si se sienten mal después de recibir los inyectables.
Por otra parte, Biden destacó que este miércoles Estados Unidos llegará al suministro de 200 millones de dosis de vacunas contra la Covid-19, que es causada por el coronavirus SARS-CoV-2.
Inicialmente, el presidente se propuso la meta de 100 millones de dosis en los 100 primeros días de su gobierno, que se cumplen el 30 de abril, y después duplicó la cifra para el mismo periodo.
Todas las personas mayores de 16 años son elegibles ahora para recibir una vacuna, afirmó el presidente, quien señaló que el 90 por ciento de los estadounidenses viven a menos de cinco millas (ocho kilómetros) de algún lugar donde pueden recibir un inmunógeno.
Estados Unidos autorizó para uso de emergencia contra dicha enfermedad las vacunas de las empresas Pfizer/BioNTech y Moderna, de dos dosis, y la de Johnson & Johnson (monodosis).
Autoridades sanitarias recomendaron la semana pasada detener la aplicación del inyectable de la última compañía tras la detección de trombosis en seis mujeres menores de 48 años, incluida una fallecida.
Datos del portal digital Worldometer precisan que Estados Unidos acumula 32,5 millones de casos de la Covid-19 y casi 583 mil decesos, como la nación más perjudicada por la crisis sanitaria.
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