Conocer y preservar ‘cuánto tenemos debajo de nuestros pies’, saber cuán importante es ‘tener los pies sobre la tierra’ y que ‘cuidar el suelo es salvar la vida’, fueron máximas repetidas en esta reunión virtual de expertos, productores y hacedores de políticas, unidos en la urgencia global de ‘dar voz al sonido de un suelo vivo’.
Desde su último informe sobre el tema la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que junto a su Alianza Mundial de los Suelos auspicia este evento, alertó que la contaminación plantea amenazas preocupantes, de escala y gravedad aún desconocida, para la productividad agrícola, la seguridad alimentaria y la salud humana.
El cambio de uso del suelo, de ecosistemas naturales, a actividades agrícolas, ganaderas, industriales, turísticas, petroleras, mineras agudizaron la reducción y la perdida de la biodiversidad global ‘que ponen en peligro el delicado equilibrio que tardó miles de millones de años en evolucionar y especializarse’.
Hoy se sabe que los suelos albergan más del 25 por ciento de la biodiversidad de nuestro planeta y el 13 por ciento de esa superficie está degradada.
Todo cuanto comemos y bebemos pasa a través de la biota del suelo una y otra vez, por lo tanto, necesitamos espacios sanos para una comida sana, ambientes sanos, personas sanas y una vida sana.
Las acciones del sector privado sobre la biodiversidad del suelo y la salud de ese vital recurso, caracterizaron las sesiones de esta reunión, en términos de situación y desafíos de la conservación y la utilización sostenible de la diversidad biológica.
Una mirada profunda a los conocimientos científicos, técnicos, indígenas y tradicionales actuales, unido a la necesidad de explorar oportunidades para la investigación colaborativa y a ampliar los enfoques sostenibles matizaron también la agenda temática.
El franco declive de la biodiversidad y la importancia de encarar ese problema en diferentes áreas de competencia, incluso de la FAO, como en agricultura, pesca y sistemas alimentarios para trabajar hacia la sostenibilidad, fue otro de los aspectos destacados.
Las causas y las consecuencias de la pérdida de la biodiversidad constituyen grandes y graves desafíos que enfrenta el planeta, por razones diversas, pero la actividad humana es una de los principales factores que influye en la extinción de las especies.
El simposio presentó iniciativas nacionales, regionales y globales capaces de reforzar el diseño, la planificación, la implementación y el monitoreo, que contribuyan al logro de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de las ONU.
Particularmente el 15, insta a gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad.
La deforestación y la desertificación -provocadas por las actividades humanas y el cambio climático- suponen grandes retos para el desarrollo sostenible y han afectado las vidas y los medios de vida de millones de personas en la lucha contra la pobreza, indica ese ODS.
Las acciones fundamentales están encaminadas a la aplicación de la Carta Mundial de los Suelos junto con las Directrices Voluntarias para la Gestión Sostenible, de la cual se ocupa este evento.
Asimismo, tiene el propósito de allanar el camino hacia la décimoquinta reunión de las partes del Convenio sobre Diversidad Biológica (COP15), con sede en China del 11 al 24 de octubre próximo, donde quedará definido el marco global para la biodiversidad posterior a 2020 bajo la premisa Civilización ecológica: Construyendo un futuro compartido para toda la vida en la Tierra.
Virginijus Sinkevicius, comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca de la Unión Europea, destacó al intervenir en el simposio que de ese encuentro en la nación asiática debe esperarse emerja un acuerdo muy ambicioso, el cual comparó por su dimensión e importancia con Acuerdo de París sobre cambio climático.
Previo a ello, explicó Elizabeth Maruma Mrema, secretaria ejecutiva del Convenio sobre la Diversidad Biológica, las partes sostendrán un encuentro para evaluar las acciones del decenio 2020-2030 y elaborar el llamado plan de acción sobre biodiversidad del suelo, fase también preparatoria de la COP15 en la ciudad de Kunmíng.
Ciencia y política unidas para examinar la situación y los desafíos de la conservación y la utilización sostenible de la diversidad biológica del suelo. tal como lo definió QU Dongyu, director general de la FAO, en la apertura del evento
Para el ministro de Agricultura y de Asunto Rurales de China, Tang Renjian, entre los propósitos es esencial fortalecer la colaboración mundial a través de marcos multilaterales agrícolas, así como la Cooperación Sur-Sur y Triangular para afianzar las capacidades de países en desarrollo.
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