‘Si las infecciones siguen aumentando a este ritmo, esperamos que en los próximos tres meses los países de nuestra región tengan que mantener e incluso aumentar aún más su capacidad de camas en las unidades de cuidados intensivos’, alertó la directora de la OPS, Carissa F. Etienn.
Recomendó a los países contratar y capacitar a más trabajadores de la salud y personal especializado, para apoyar aquellos que trabajaron durante una prolongada crisis provocada por el virus SARS-CoV-2.
Teniendo en cuenta que esto sería algo bien complejo materializarlo, es más viable -en su opinión- retomar las estrategias sobre prevención.
Explicó que las vacunas se están distribuyendo, pero es una solución a corto plazo para reducir los contagios, pues ya sabemos que no hay suficientes inyectables para todos.
Todas las naciones deben continuar con las medidas de salud pública que contemplan el distanciamiento físico y social, uso correcto de las mascarillas y evitar reuniones en espacios cerrados.
Asimismo, recomendó priorizar las pruebas para detectar el coronavirus y desde la atención primaria dar seguimiento a los contactos de los contagiados. Además de redireccionar los mensajes de salud pública hacia la juventud, teniendo en cuenta la incidencia de la enfermedad en ese segmento poblacional actualmente.
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