Colonial Pipeline, que transporta por ocho mil 850 kilómetros de oleoductos más de 2,5 millones de barriles por día de gasolina, diesel y combustible para aviones, explicó que espera restaurar gran parte de sus operaciones antes del fin de la semana.
La secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, admitió este martes que tras el ciberataque el país sufre de escasez de algunos suministros energéticos, pero no de gasolina.
‘No es que tengamos una escasez de gasolina, es que tenemos una escasez de suministros. Las cosas volverán a la normalidad pronto’, dijo la directiva.
La interrupción del suministro de combustible provocó que los precios de la gasolina en los surtidores alcanzaran máximos de varios años y la demanda se disparara en algunas zonas.
En este contexto, en la bolsa de Londres, los futuros del crudo Brent del mar del Norte, de referencia en Europa, subieron 23 centavos, o un 0,3 por ciento, hasta ubicarse en 68,55 dólares por barril.
Mientras, en la bolsa de Nueva York los futuros del petróleo intermedio de Texas ganaron 36 centavos, o un 0,6 por ciento, y se situaron en 65,28 dólares por barril.
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